Tailandia: El Banco Central reanuda las bajadas de tipos en agosto
En su reunión del 13 de agosto, el Banco de Tailandia (BOT) decidió por unanimidad recortar el tipo de interés oficial en 25 puntos básicos, hasta el 1,50%, tras haberlo mantenido sin cambios en junio. El actual ciclo de relajación de la política monetaria, que comenzó en octubre de 2024, asciende ahora a 100 puntos básicos, con el tipo de interés oficial en su nivel más bajo desde febrero de 2023.
El Banco espera que las presiones sobre los precios sigan siendo moderadas este año, mientras que el crecimiento económico se verá afectado por las subidas de los aranceles estadounidenses y el debilitamiento del sector turístico. En consecuencia, el BOT está adoptando una política monetaria más acomodaticia.
El Banco Central indicó que «la política monetaria debería ser acomodaticia en el futuro para apoyar la economía». En consecuencia, la mayoría de nuestros panelistas esperan otro recorte de 25 puntos básicos para diciembre. Las presiones sobre los precios se mantendrán por debajo del rango objetivo del 1,0%-3,0% hasta finales del próximo año, y el crecimiento del PIB se verá afectado por el proteccionismo comercial mundial. Dicho esto, una minoría de nuestro panel de analistas considera que los tipos se mantendrán en su nivel actual, ya que el BOT podría optar por preservar parte de su ya limitado margen de maniobra en un entorno económico incierto.
La próxima reunión del BOT está prevista para el 8 de octubre.
Sathit Talaengsatya y Enrico Tanuwidjaja, de United Overseas Bank, declararon: «Dadas las débiles perspectivas económicas, los rendimientos de la deuda pública y las actuales previsiones de inflación del BOT y de los participantes en el mercado, existe un riesgo creciente de que las expectativas de inflación se desanclen, lo que podría repercutir en los comportamientos de fijación de salarios y precios de empresas y hogares. […] Por lo tanto, consideramos bastante probable una mayor relajación de la política monetaria, no sólo para volver a anclar eficazmente las expectativas de inflación, sino también para estimular la actividad económica en general y mitigar los riesgos para la estabilidad financiera.»