Argentina: El crecimiento del PIB se ralentiza en el cuarto trimestre, pero sigue siendo optimista
El crecimiento del PIB se ralentizó al 1,4% intertrimestral desestacionalizado en el cuarto trimestre, frente al 4,3% del tercer trimestre. Siempre iba a producirse una ralentización, dada la insostenible rapidez del crecimiento del tercer trimestre, pero la lectura del cuarto trimestre seguía siendo elevada en términos históricos. La bajada de la inflación y los tipos de interés, junto con las reformas liberalizadoras, impulsaron la economía. En términos anuales, la actividad económica repuntó un 2,1% en el 4T, contrastando con la caída del 2,0% del periodo anterior y marcando el mejor resultado desde el 3T de 2022.
El consumo privado aumentó un 3,2% intertrimestral en el cuarto trimestre, por debajo de la expansión del 4,4% del tercer trimestre. El crecimiento del consumo público se moderó al 0,8% en el cuarto trimestre (3T: +1,7% intertrimestral). Por su parte, el crecimiento de la inversión fija se aceleró hasta el 11,3% en el cuarto trimestre, tras la expansión del 10,3% registrada en el trimestre anterior.
En el sector exterior, las exportaciones de bienes y servicios mejoraron hasta el 7,7% en el cuarto trimestre (3T: +3,5% intertrimestral). Por su parte, las importaciones de bienes y servicios crecieron un 12,9% en el cuarto trimestre (+9,7% intertrimestral).
Sergio Armella, de Goldman Sachs, comentó los resultados anteriores y las perspectivas: «Un importante ajuste fiscal, estrictos controles de capital, financieros y cambiarios, un ajuste al alza de los precios regulados rezagados y un repunte de la inflación fueron lastres para el crecimiento en 2024, en particular durante el primer semestre del año. De no haber sido por una cosecha mucho mejor que la de 2023, el ajuste de este año habría sido probablemente más profundo. Dicho esto, la economía experimentó una fuerte recuperación en la segunda mitad del año, y esperamos que el impulso positivo del crecimiento continúe en los próximos trimestres», afirman los analistas de Itaú Unibanco: «Prevemos un crecimiento del PIB en 2025 del 4,5%, con riesgos al alza debido a un elevado arrastre y a la mejora esperada de los componentes del lado de la demanda. Por el lado de la demanda, es probable que la recuperación de los salarios reales y los menores tipos de interés apoyen el consumo privado.»