Canadá: El crecimiento del PIB mejora en el cuarto trimestre
El crecimiento del PIB mejoró hasta el 2,6% en tasa anualizada desestacionalizada (SAAR) en el cuarto trimestre, desde el 2,2% del tercer trimestre. Esta cifra supera la estimación preliminar del 1,8% y las expectativas del mercado. La bajada de los tipos de interés, la desgravación fiscal del impuesto sobre bienes y servicios y el adelanto de las exportaciones para adelantarse a los posibles aranceles de EE.UU. fueron los principales motores del crecimiento. En términos anuales, el crecimiento económico mejoró hasta el 2,4% en el cuarto trimestre, tras el 1,9% del periodo anterior.
El crecimiento del consumo privado alcanzó un máximo de más de dos años (5,6%) en el cuarto trimestre, frente al 4,2% del tercer trimestre. El crecimiento del gasto público fue del 1,4% (3er trimestre: +5,4% SAAR). Por su parte, la inversión fija se recuperó y creció un 9,9% en el cuarto trimestre, frente a la disminución del 0,8% registrada en el trimestre anterior. En el frente exterior, las exportaciones de bienes y servicios se recuperaron, creciendo un 7,4% en términos anualizados desestacionalizados en el cuarto trimestre (T3: -0,8% SAAR). Asimismo, las importaciones de bienes y servicios repuntaron, creciendo un 5,4% en el cuarto trimestre (T3: -1,2% SAAR).
Los datos preliminares muestran que el PIB real creció un 0,3% en enero, impulsado por los aumentos de la minería, el petróleo y el gas, el comercio mayorista y el transporte, compensados en parte por el descenso del comercio minorista. Para el conjunto del primer trimestre, nuestro consenso apunta a un sólido crecimiento del PIB, impulsado principalmente por las exportaciones y el gasto privado.
En palabras de LJ Valencia, de Desjardins: «Gracias al buen dato del PIB de finales de año y a la rápida ralentización del crecimiento demográfico, el PIB real per cápita aumentó en el cuarto trimestre, invirtiendo la tendencia a la baja de los trimestres anteriores. Lo mismo puede decirse del consumo per cápita. […] Sin embargo, ahí se acaban las buenas noticias. La economía se enfrenta a importantes vientos en contra derivados de la inminente amenaza de fuertes aranceles estadounidenses, además de la ralentización del crecimiento demográfico y el muro de renovación hipotecaria. En particular, las amenazas arancelarias arrojan importantes riesgos a la baja para el crecimiento económico y al alza para la inflación.»